Última actualización el 7 de octubre de 2022
Rodrigo Ormeño Gómez, “El mentolato” es un tipo duro, un delincuente con harta ficha, que no solo ha pasado buena parte de su vida adulta en la cárcel, sino que en sus escarceos con los bajos mundos ha estado cerca, muy cerca, de sujetos situados en la pirámide de este, donde parece que se sitúa él mismo ahora.
Quienes saben cuentan que el martes en la tarde, luego de haber sido formalizado ante el Juzgado de Letras y Garantía de Curanilahue, luego de lo cual quedó en libertad, pese a las al menos tres condenas que posee, Rodrigo Ormeño Gómez, más conocido como “El Mentolato” volvió a ser visto en San José de Colico, el sector donde algunas horas antes fue denunciado por robo de 23 metros cúbicos de madera, la fue cargada en dos camiones desde un predio de Forestal Arauco. Los móviles eran escoltados en un ostentoso jeep Toyota por Ormeño, de 43 años, quien es sindicado por Radio Bío Bío como la cabeza de una de las tantas estructuras organizadas de robo de madera que existen en la Provincia de Arauco.
Los tres vehículos fueron detenidos por Carabineros en la madrugada del lunes en el cruce del sector Villa Alegre, comprobando los efectivos que existían irregularidades en los documentos que portaban, por lo cual quedaron detenidos por el robo de la madera y, además, por las amenazas que Ormeño profirió en contra de los dos supervisores forestales que los sorprendieron y denunciaron ante la policía.
En la audiencia respectiva, los tres fueron formalizados por la nueva Ley de robo de madera y “El mentolato”, además, por las amenazas, pero todos recobraron su libertad, desechando la petición de prisión preventiva formulada por la Delegación Presidencial, dada la pena en abstracto que arriesgan los imputados.
Robo y drogas
Ormeño es un viejo conocido de la justicia, con la cual comenzó a tener problemas serios en 2005, cuando personal de la Sección de Investigaciones Policiales (SIP) de Los Alamos lo detuvo, sindicado como uno de los autores de un asalto cometido contra la oficina de una empresa forestal ubicada en el sector de Huillinco, en Cañete, y desde la cual los ladrones se llevaron 37 millones de pesos en efectivo.
En dicha ocasión, Ormeño (que ya había estado preso) argumentó ante el Tribunal Oral en lo Penal de Cañete que él era inocente y que nada tenía ver en los hechos, asegurando que el verdadero cerebro del asalto era “Yovani Albornoz”, refiriéndose a Yohanny Albornoz González, sobrino del mítico “Martillo”, Reinedio González Durán, a quien sucedió al mando del clan familiar que reina en la población “Emergencia” de Hualpén, luego de que su tío fuera arrestados y condenado en 2007.
Sin embargo, Albornoz, más conocido como “Chucky”, también fue detenido. La primera vez, en 2010 (por narcotráfico y lavado de activos) y luego en 2020, cuando su banda completa fue desbaratada por la PDI mientras trasladaban más de 800 kilos de pasta base de cocaína desde el norte hasta el Gran Concepción. La particularidad de ese caso fue que entre los “soldados” de Yohanny que cayeron estaba Emilio Berkhoff Jerez, famoso “weichafe” de la organización radical Weichán Auka Mapu (en este enlace pueden revisar una nota más completa acerca de las conexiones entre este y la banda de “El Chucky”). El vínculo entre Berkhoff y “Chucky” se produjo debido a que el segundo posee una casa en Los Alamos (de donde es originaria su madre) y por ende es una zona que conoce muy bien, al punto que varios de sus soldados son de allí, y conocieron a Berkhoff en la cárcel de Lebu.
Sin embargo, los jueces no creyeron la versión de “El mentolato”, que dijo haber sido amenazado en la cárcel por parientes y amigos de Yohanny, y lo terminaron condenando (junto a otro de los detenidos por el caso) a una pena de 10 años y un día.
En el mundo narco
Domiciliado en la población Eleuterio Ramírez de Curanilahue, de profesión chofer, Ormeño fue condenado en 2015 ante el Tribunal Oral en lo Penal de Concepción, luego de que dos años antes lograra la libertad, por buena conducta. Sin embargo, el 20 de marzo de ese año fue detenido junto a otros dos sujetos, con los cuales se movilizaba en un taxi, en la Villa Futuro de Chiguayante.
De acuerdo con la acusación que le formulara el fiscal José Patricio Aravena, tenía en su poder 8.3 gramos de cocaína, dosificada en 37 envoltorios, así como 6.3 gramos de marihuana, todo lo cual ocultaba en una bolsa que introdujo en su zona genital al ver a los carabineros. Además, en la misma bolsa también escondía un millón 182 mil pesos.
Según la versión de “El Mentolato” él había llegado esa mañana a Concepción a comprar unos repuestos, por lo que le pidió ayuda a su cuñado, luego de lo cual fueron a comer junto a unos amigos del sector Leonera. Uno de ellos, argumentó, sería el dueño de la cocaína, aseverando que la marihuana era para él, pues indicó que consumía esa droga desde los 13 años. Sobre el dinero, dijo que era para pagar los repuestos que necesitaba para arreglar un Nissan V-16 que tenía, el cual pensaba vender para así cancelar sus estudios universitarios.
El fallo del tribunal penquista cuenta al respecto que, según su versión, Ormeño aseguró que “iba a pagar la universidad, la que empezó cuando estuvo preso”. Según él, estudiaba en la sede de Cañete de la UCSC, con beca Millenium, y el 75% se lo pagaba la beca y el 25% Gendarmería, pero cuando salió ya no tuvo el beneficio, por lo que debía 500 mil pesos, aseveró.
Una vez más, el tribunal no creyó en su versión y lo condenó como autor de tráfico de drogas en pequeñas cantidades, a una pena de 220 días de presidio.
Al año siguiente “El mentolato” volvió a ser detenido por drogas, aunque en esta ocasión (junio de 2016) cayó con 117.6 gramos de marihuana, además de balanzas digitales y bolsas de nylon, en una casa del sector Miraflores, en Curanilahue, donde lo aprehendió la PDI. El 16 de noviembre de ese año el Tribunal de Garantía de Concepción lo condenó a 541 días de presidio por tráfico en pequeñas cantidades, así como al pago de una multa de 10 UTM, condena que terminó de cumplir a fines de 2017.
El motín y las amenazas
Antes de ello, no obstante, la Defensoría Penal Pública (DPP) recurrió a su favor, debido a una sanción que le impuso el alcaide de la cárcel de Arauco, el 17 de enero de 2017, cuando Ormeño y otros dos sujetos fueron acusados de incitar a un motín a los demás presos. Según el documento de la propia DPP, los incidentes comenzaron cuando otro interno (Francisco Díaz Contreras) insultó a un gendarme durante el desencierro, tras lo cual Ormeño y el reo Luis Jorquera Martínez “comienzan nuevamente a incitar al desorden masivo, vociferando a viva voz que deben amotinarse”.
Asimismo, según Gendarmería, “los internos Luis Jorquera y Rodrigo Ormeño son reiterativos en este tipo de faltas, consideradas como graves, ya que el día de ayer fueron individualizados protagonizando este tipo de actos”.
Como consecuencia de ello, se impuso a los acusados el traslado hasta el Centro Penitenciario Bío Bío, medida que fue anulada por el Juzgado de Garantía de Arauco, el cual estimó que Gendarmería no tenía autoridad para ello.
El hecho por el cual formalizado el martes, sin embargo, no es el primero del mismo tipo, puesto que en al menos una querella presentada ante los tribunales de la Provincia de Arauco se le implica en situaciones semejantes.
En efecto, según dicho libelo, el 18 de agosto de este año, personal de Bosques Arauco detectó un camión autocargante sustrayendo metros ruma desde el predio Yane, el cual huyó por varias rutas hasta salir a la 160, donde personal de la unidad de supervisión forestal de Arauco, que los seguía trató de fotografiar el vehículo cuando este ingresó al servicentro Copec ubicado en Horcones.
Sin embargo, en ese momento fueron abordados “por cinco individuos que comenzaron a increparlos verbalmente y dar golpes al vehículo, tratando de abrir las puertas de este. Lograron identificar entre ellos a dos individuos, quienes serían el apodado ‘Kendo’ y otro sujeto apodado ‘Mentolato’ de nombre Rodrigo Ormeño Gómez”.
