Última actualización el 3 de octubre de 2022
En una zona de bosque nativo fueron devueltas a su hábitat natural dos pudúes hembra por parte de personal del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Biobío y personal del Parque Alessandri Coronel, de Fundación CMPC, luego de un proceso de recuperación en el Centro de Rehabilitación Ñacurutú, ubicado en Coliumo, Tomé.
“Esta acción es posible gracias al compromiso de la ciudadanía que informa al SAG oportunamente que estos ejemplares se encontraban heridos, permitiéndonos trasladarlos a centros de rescate, como en este caso a Ñacurutú, donde son evaluados y reciben el tratamiento y cuidado necesario para su reinserción, conservando su instinto natural de escape y alerta ante humanos”, destacó el Director Regional (s) del SAG de Biobío, Roberto Ferrada.
Por su parte, Maite Artiagoitia, coordinadora del área de cultura y naturaleza de la Fundación CMPC, indicó que “el parque no es solamente un lugar de acogida para las personas, para aprender, sino también para la fauna nativa de nuestra zona. El parque es un espacio natural, tiene una zona de bosque nativo donde se liberaron estas especies, tiene un sotobosque, es un espacio bien protegido, tiene rejas que si bien protegen en gran parte de las amenazas de perros asilvestrados, esperamos también que la comunidad cercana cuide a sus propios animales, una tenencia responsable de sus mascotas, para que no lleguen a estos espacios”.
En este sentido, Cristian Herrera, Director de la Fundación Ñacurutú, explicó que una de las pudúes es un ejemplar juvenil, de un año de edad aproximadamente, que fue hallado en enero de este año en un sector rural de la comuna de Santa Juana, muy delgada y debilitada. En un comienzo se la cuidó con dieta especial para animales herbívoros y se le administró la papilla con jeringa hasta que su condición fue mejorando y era capaz de alimentarse por sí misma, logrando consumir variados tipos de vegetación.
La otra pudú, en tanto, es una adulta de unos dos años de edad que fue encontrada por una vecina en la localidad de Rafael, comuna de Tomé, en julio de este año, con heridas en parte posterior y lomo producto de mordidas de perros, siendo trasladada por funcionarios de Carabineros de Chile a Ñacurutú, donde curaron sus lesiones y realizaron un manejo adecuado para minimizar el estrés que presentaba.
Por ello, el directivo del SAG llamó a la ciudadanía a respetar la fauna silvestre y a que, en caso de avistamientos de pudúes en su hábitat, cuando éstos no presenten alguna lesión o problema de movilidad, que no sean molestados y “dejarlos que retornen de forma voluntaria a su medio natural, ya que la manipulación inadecuada y el cautiverio son un grave daño que se les provoca a estas especies”.
Asimismo, destacó que la fauna silvestre tiene un rol fundamental en el equilibrio ecológico del medio ambiente y es benéfica para la agricultura, y recordó a la comunidad regional que no se puede mantener especies de aves y animales silvestres en cautiverio sin autorización del Servicio Agrícola y Ganadero.
El pudú es una especie que también está protegida por la Ley de Caza, por lo que su caza y captura están prohibidas. Su estado de conservación está catalogado en la zona sur como vulnerable.
Texto original y foto: Comunicaciones Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Bío Bío
